¿Estás acostumbrado a tener una misma contraseña, clave o pin para todas tus cuentas o páginas? Pues que sepas que es lo más peligroso que puedes hacer. Por ahí no vas bien (a no ser que quieras que te hackeen tu perfil de Instagram o que se hagan con los datos de tu cuenta bancaria). Lo bueno es que le vamos a poner remedio con estas recomendaciones para crear contraseñas seguras y guardarlas todas en un gestor de contraseñas.
Los expertos dicen que no solo no debes utilizar la misma contraseña para todas tus claves de acceso, si no que deben ser contraseñas seguras y robustas. ¿Y cómo lo consigues?
Consejos para elegir una contraseña segura
Como te decíamos, no debes utilizar la misma contraseña siempre. Ya que, si los ciberdelincuentes la descubren una vez, podrían entrar en todas tus cuentas. Ya bastante grave es que entren en tu cuenta de correo, como para que también puedan entrar en tu Facebook o en tu banco, ¿no te parece?
Así que, para que tus claves sean difíciles de hackear, sigue estas recomendaciones. Cuantas más cumplas, más robustas serán:
- Utiliza contraseñas largas. Cuantos más caracteres le pongas, mucho mejor.
- Introduce siempre caracteres de letras y número y, a poder, ser aleatorios.
- Que no falten los caracteres especiales: asteriscos (*), porcentaje (%), interrogaciones (?)...
- Combina letras mayúsculas y minúsculas.
Si crees que ya tienes una contraseña que puede ser lo suficientemente robusta, ahora puede llegar otro problema: variar la contraseña para cada aplicación. Para recordarlas todas, los expertos recomiendan las claves modulares.
Cómo crear una clave modular
¿Qué son? Pues una contraseña que esté formada de varias partes diferenciadas y con nexos concretos.
Por ejemplo, puedes utilizar varias palabras que recuerdes fácilmente separadas por caracteres especiales. Ejemplos para que lo veas más claro:
- Nombre de tu primo mayor-DNI-Nombre de abuelo materno: Paco-33333333-Manolo
- Mote*Nombre Mascota*Nota de selectividad: Cachuli*Marley*9,45
- Número de hijos¿fecha de cumpleaños?Primer gato que has tenido: 2¿01051981?Copito
Con esta forma modular, te será más sencillo recordar tus claves, porque unes partes o palabras; siempre es mejor que acordarte de una palabra inventada.
Pero recuerda que debes combinarlas de forma diferente para cada aplicación o cuenta, así será más difícil de hackear.
La comprobación de que tu contraseña es segura
Si ya tienes la contraseña que sigue todos los pasos anteriores, un paso más para saber si es segura es comprobarla con herramientas, que puedes encontrar de forma gratuita.
Por ejemplo, Kaspersky. Introduces tu clave y la página te dará información sobre su nivel de seguridad. Y si no lo es, te indicará cómo puedes mejorarla.
Otra página es Ciberprotector. Mismo método que la anterior: pones la contraseña que quieres analizar y te dirá si es segura o no.
Gestores de contraseñas: guarda todas tus claves
Los gestores o administradores de contraseñas te lo ponen muy fácil para que recuerdes todas tus contraseñas.
¿Cómo funcionan? Son programas, algunos gratuitos y otros de pago, que almacenan todas tus claves de forma cifrada a través de una única clave (una contraseña maestra o master password). Solo tendrás que recordar esa única contraseña para acceder al resto de claves de tus cuentas.
Con estas herramientas te sacas de un plumazo tener que recordar treinta contraseñas diferentes. Será más difícil que olvides la master password o que te líes al elegirla, porque solo es una.
Además, al tener solo una clave, puedes hacerla más robusta y más difícil de hackear siguiendo los pasos anteriores.
Buscando en Google encontrarás un montón, como NordPass o LastPass.
Tras leer todos los pasos, ¿cumples la mayoría de las recomendaciones de los expertos?
Si no es así deberías replantearte utilizar alguna de las herramientas que te hemos enseñado… Lo más importante es la seguridad de tus contraseñas.