¿Qué es IoT?

IoT es una expresión del inglés que significa "Internet Of Things"; en castellano, "Internet de las Cosas".

Se define como una agrupación e interconexión de dispositivos y objetos a través de una red (privada o pública) para comunicarse e interacccionar entre sí y/o con otros. Pueden ser dispositivos de uso cotidiano, como electrodomésticos o prendas de ropa, o sofisticadas herramientas industriales.

Todos ellos incorporan sensores, software u otras tecnologías y se convierten en objetos inteligentes que no necesitan intervención humana para interactuar. El IoT permite una comunicación fluida entre personas, procesos y cosas.

Aunque existe desde hace décadas, es ahora cuando ha irrumpido en múltiples sectores gracias, en buena parte, a la reducción del coste de los chips de ordenador y Al mayor ancho de banda en las conexiones de internet.

Fue el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) quién utilizó por primera vez el término "Internet de las Cosas" (IoT) en el año 1999.

En el año 2010, el número de dispositivos conectados a internet ya superaba al número de personas en el mundo.

Cómo funciona Internet de las Cosas (IoT)

El IoT se basa en la recopilación y el intercambio de datos en tiempo real.

Estos son los elementos básicos que necesita IoT para su aplicación:

En primer lugar, un dispositivo inteligente que recoja datos (sobre consumo, funcionamiento, usuario...) y los envíe a través de internet. Pueden ser sensores o interruptores; los primeros envían datos a otro lugar y los segundos los envían a otro objeto conectado.

Quien los recibe es una aplicación de IoT, capaz de analizar y procesar esos datos utilizando tecnología de machine learning o Inteligencia Artificial, y que los devuelve al dispositivo IoT en forma de respuesta inteligente que lleva a una determinada acción o comportamiento.

El IoT está estrechamente relacionado con el cloud computing o computación en la nube, ya que es una de las formas más usadas actualmente para el almacenamiento remoto de datos y la administración de dispositivos IoT.

Dispositivos IoT

Todo dispositivo u objeto susceptible de ser conectado a la red puede ser un dispositivo IoT. Algunos de lo más populares son:

  • Coches conectados

  • Smartwatchs o relojes inteligentes

  • Enchufes inteligentes

  • Electrodomésticos

  • Aplicaciones domóticas: alarmas, sistemas de vigilancia, cerraduras, detectores de humo...

  • Mecanismos de eficiencia energética: termostatos, contadores inteligentes, enchufes inteligentes...

  • Dispositivos médicos

  • Etiquetas y lectores RFID

Usos de la tecnología IoT

El IoT (o Internet de las Cosas) es aplicable a sectores y actividades muy diferentes.

En el campo de la administración pública, es visible en las llamadas Smart Cities o Ciudades Inteligentes para aplicaciones en iluminación, gestión de residuos, control de accesos o aparcamiento...

En sectores como la agricultura o la ganadería se utiliza para gestionar dosis de fertilizantes o abonos, control de combustible o estudio de las propiedades y condiciones del suelo.

En la medicina, sus aplicaciones van desde la posibilidad de seguimiento personalizado de pacientes y monitoreo de la salud en general a los avisos de emergencias.

El transporte es otro de los sectores que ya lo utiliza, para hacer seguimiento de su flota o de incidencias en tiempo real.

El sector industrial cuenta con su propio IoT especializado, IIoT, con aplicaciones en la fabricación, la planificación de recursos y stocks o la gestión de riesgos y seguridad laboral.

En todos los casos, el IoT hace posible disponer de más datos, compartirlos, analizarlos y tomar decisiones rápidamente, así que su uso seguirá creciendo y diversificándose exponencialmente.